SAMS desarrolla su segundo plan de implantación

Tres años después de la primera implantación de SAMS (SAMU Advanced Management System), SAMU ha iniciado el segundo plan de implantación del programa en sus centros y servicios. SAMS es el sistema de gestión integral de SAMU y sirve para digitalizar y sistematizar todas las intervenciones de la entidad. Esta segunda fase de implementación, que se prolongará hasta diciembre de 2024, tiene como objetivo incorporar de forma organizada los nuevos centros a SAMS y afianzar el uso del sistema en aquellos centros en los que ya está implantado, aumentando el uso de funciones del mismo.

Este II Plan de Implantación de SAMS está liderado por la dirección de Innovación e Implantación Digital, bajo la dirección de Almudena Chávez, con el apoyo de SAMU Tech, bajo el liderazgo de Teresa Gómez.

El plan de implantación incluye cuatro actividades principales: formación, visitas, mentoría y difusión. La formación se está llevando a cabo a través de webinars de una hora de duración con grupos de centros y servicios. Están mentorizados por un Mentor SAMS, cuyas principales funciones son reportar mensualmente la consecución de los retos propuestos por parte de los centros, transmitir las dificultades encontradas y hacer propuestas de mejora en el sistema.

Los mentores SAMS están haciendo una labor excepcional de apoyo a la implantación de SAMS, según subraya Almudena Chávez. Disponen de un cuadro de seis retos para llevar a cabo en seis meses.

Las visitas a centros o servicios tienen el objeto de reforzar el apoyo de la dirección en las unidades operativas de la entidad y ver in situ las problemáticas que le impiden afianzar SAMS en su gestión diaria.

SAMS, durante su historia, ha superado obstáculos como el reto que supuso el apagón analógico en centros en los que el papel era el elemento principal para guardar información o la adaptación necesaria a este sistema en centros de trabajo en los que funcionaban otra aplicaciones desde hacía muchos años.

Otro de los grandes obstáculos de la implantación de SAMS fue el desfase del sistema con las necesidades actuales de la entidad. Los dos años de desarrollo supusieron una descompensación adaptativa del sistema a la realidad de la entidad y hay funciones en la gestión de centros que quedaron sin cubrir o que resultaron deficientes.

Este proceso de desarrollo y superación de obstáculos ha ido fortaleciendo a SAMS. Ahora, este segundo plan de implantación está en pleno desarrollo gracias al impulso de la subvención de fondos europeos recibida por Fundación SAMU en 2023 para desarrollar su proceso de transformación digital, proyecto al que se ha denominado SAMU Orión.

SAMS genera tres beneficios claros a sus usuarios: centraliza la mayor parte de sus gestiones en una sola plataforma digital; genera un histórico de registros, que permite un análisis y recordatorio de las intervenciones llevadas a cabo; permite una coordinación actualizada de intervenciones entre compañeros de un equipo de trabajo; y, por último, unifica un «lenguaje digital SAMU» para la gestión de centros. «El uso de un solo sistema de gestión unifica el lenguaje de registros, e incluso moldea el modo de hacer», tal y como explica Almudena Chávez.

«Pero, lo que es más importante, y objeto final de todo esta gestión del cambio, es mejorar la atención a las personas usuarias de la entidad. Ya sabemos que la gestión de datos se ha convertido en la protagonista de esta era de la digitalización por el impulso que ejerce allá donde se instala. Un buen uso de herramientas tecnológicas reduce limitaciones analógicas como son almacenamiento de grandes cantidades de datos en un espacio reducido; la protección de grandes cantidades de datos sensibles en un espacio concreto; el filtrado de los datos para obtener una información específica; el análisis diacrónico (o la evolución en el tiempo) y el sincrónico de las intervenciones; la prevención de situaciones no deseadas, o la atención coordinada y estable», relata la directora de Innovación e Implantación Digital.

SAMS estará unido a SAMU en los próximos años y pretende adaptarse a las necesidades del mercado para comercializarse fuera de la propia organización. «De alguna forma SAMS ha materializado el germen innovador de la transformación que está viviendo actualmente la entidad», apunta Chávez. SAMU Tech, por su parte, se incorpora en esta segunda etapa de impulso del sistema para darle a SAMS «rol» de producto de mercado.
En los próximos meses, no obstante, la prioridad es seguir extendiendo su uso y dominio por parte de los usuarios y adaptar SAMS a nuevas necesidades de los centros y a las líneas de negocio incorporadas de forma reciente a la entidad.

SAMU Orión: el rol de la tecnología en los servicios sanitarios y sociales

Orión es una constelación icónica, observable desde ambos hemisferios y, por eso, reconocible por las más diversas culturas. Está formada por estrellas prominentes que, juntas brillan aún con más intensidad en el cielo nocturno. Tal es así que, en la antigüedad, marcaba un rumbo a seguir por viajeros y navegantes. Estas singularidades de Orión permiten establecer paralelismos con SAMU y, por eso, Orión es el nombre elegido para denominar al proyecto de transformación digital integral de la organización. «Habla de tradición y modernidad, y de pasado y de futuro», explica José Antonio Trujillo, director general adjunto de SAMU e impulsor de este proceso.

Después de 40 años de trayectoria, SAMU está inmersa en un camino para superar las limitaciones de la gestión tradicional y abrazar un futuro digitalizado y tecnológico en la gestión, los procesos y los servicios. SAMU Orión es la marca que engloba todos estos avances, los ya realizados, los que están en marcha y los que están por llegar.

La transformación digital, de hecho, es un compromiso a largo plazo y estratégico para la organización. Tal y como recuerda Trujillo, es uno de los tres ejes del Plan 2030, sobre los que debe construirse el SAMU del futuro como «organización de personas que cuidan de las personas»: transformación digital, internacionalización y gestión del talento.

La dirección de SAMU ha iniciado la fase de socialización de los avances y retos que abarca la transformación digital del grupo, que, hace solo cuatro años, sufría un retraso estructural en cuanto al uso de herramientas informáticas y soluciones digitales aplicadas a sus dinámicas de trabajo y de gestión.

José Antonio Trujillo recuerda que las licencias de aplicaciones de Office de Microsoft no se generalizaron en SAMU hasta 2020, momentos en los que la información estaba aislada por departamentos, registrada mayoritariamente en papel, y en el que muchas decisiones se tomaban más por intuición y experiencia que por un análisis de la realidad basada en datos. Ya entonces, se inició una transformación progresiva hacia la digitalización de la información.

Este proceso recibió un impulso crucial en 2023, gracias a la subvención concedida desde el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 para el apoyo a la modernización de las entidades del tercer sector, financiada a cargo del Fondo Europeo de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

La transformación digital de SAMU avanza en varios frentes. En primer lugar, en la mejora de procesos internos, gracias a la colaboración de la empresa tecnológica Inside Business Advisor, con herramientas que han permitido avances en la gestión de departamentos clave como los de administración, finanzas y laboral. Y en segundo lugar, la entidad trabaja en la creación de proyectos tecnológicos disruptivos y de alto impacto, de la mano de otro socio tecnológico, OGA Data Driven Solutions. «Aquí hablaríamos de soluciones tecnológicas dirigidas a mejorar la atención y el cuidado de las personas», explica José Antonio Trujillo.

Algunos resultados de estas estrategias son ya tangibles. Por ejemplo, la creación de un sistema central a nivel administrativo y financiero en SAMU, o la elaboración y disponibilidad inmediata de KPI´S o indicadores clave de rendimiento. «Ahora podemos conocer los resultados económicos de la empresa, o de cada una de las áreas o cada uno de los centros, con gran nivel de detalle; podemos conocer y gestionar las deudas con proveedores o clientes; trabajamos en otros muchos frentes como tener datos en tiempo real sobre aspectos laborales, centro a centro… Son solo algunos ejemplos de cómo la digitalización nos permite tener información real para tomar decisiones estratégicas para la organización, no basadas en la intuición, sino en la realidad contrastada, en lo que está ocurriendo», explica el director general adjunto.

En el capítulo de proyectos tecnológicos, OGA, junto a los equipos de SAMU, ha identificado hasta 30 oportunidades de desarrollo: desde la predicción del absentismo escolar a la identificación biométrica de usuarios menores; o de la creación de un data-lake transversal (el repositorio de los miles de millones de datos procesados por SAMU) a la traducción en lengua de signos mediante avatares de inteligencia artificial. En estos momentos, el comité de transformación digital de SAMU, liderado por Almudena Chávez y en el que están representadas las diferentes áreas de la entidad, está estableciendo prioridades para el desarrollo de estas iniciativas. Así, se decidirá qué proyectos se ponen en marcha ya.

En paralelo a todas estas iniciativas, se trabaja en la actualización de SAMS (SAMU Advanced Management System), el sistema de gestión integral desarrollado por la organización en 2018 con el objeto de permitir un registro sistematizado y exhaustivo de todas las intervenciones en los servicios en el complejo universo de actividades de SAMU. En este reedición del sistema se busca que sea capaz de responder con solvencia a las necesidades de gestión cotidiana de cada trabajador y de cada equipo.

Según apunta Trujillo, la entidad debe estar preparada para que sus sistemas puedan operar con los de las administraciones públicas para las que trabaja. Este es otro de los retos de SAMU Orión, el proyecto que aspira a situar a SAMU a la vanguardia de la tecnología asociada a servicios sanitarios.

Transformación digital: el mayor reto de la historia reciente de SAMU

La evolución constante del entorno tecnológico y las expectativas cambiantes de los beneficiarios y colaboradores presentan desafíos y oportunidades. La innovación emerge como un principio cardinal en la visión estratégica de SAMU, que se plantea, tal y como recoge el Plan 2030 de la organización, un horizonte digital integral.

En este contexto es ineludible un programa de iniciativas de digitalización que no solo reconozca la importancia de la tecnología, sino que también comprenda su potencial para transformar la manera en la que SAMU opera en todos los ámbitos internos y externos.

El plan de transformación y digitalización de SAMU se sitúa en el epicentro de la transformación corporativa de la empresa, tal como explica José Antonio Trujillo, director general adjunto de SAMU e impulsor de todo este proceso de transformación de la organización.

El principal objetivo de este plan es superar las limitaciones del paradigma de gestión tradicional y abrazar un futuro digitalmente habilitado tanto en desarrollos como en procesos.

Ha sido en 2023 y gracias a la subvención concedida desde el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 para el apoyo a la modernización de las entidades del tercer sector, financiada a cargo del Fondo Europeo de Recuperación, Transformación y Resiliencia, cuando SAMU ha podido dar un paso de gigante, complementando sus fondos propios e impulsando su plan de transformación digital.

En este periodo, SAMU ha realizado un enorme esfuerzo y, gracias a la colaboración de la empresa tecnológica Inside Business Advisor, ha desarrollado importantes herramientas que han permitido grandes avances en la gestión de departamentos claves como el de administración y finanzas y laboral.

“En primer lugar, se trazaron elementos esenciales desde el punto de vista de la tecnología doméstica. Así, nos dotamos de herramientas de gestión, no pensando en 2023, sino mirando a 2030, porque esto avanza de una forma muy rápida. Por ejemplo, cuando nosotros empezamos con esto no se sabía nada de la Inteligencia Artificial y ahora no se habla de otra cosa”, explica José Antonio Trujillo, que tomó la decisión de externalizar este trabajo con empresas de tecnología en lugar de crear un nuevo departamento interno en esta primera fase del proyecto.

El primer hito de SAMU fue tener un sistema central a nivel administrativo y financiero actual. Se realizó un importante trabajo de programación y de actualización de todo el sistema. “El primer hito fue conseguir tener una cuenta de resultados centro a centro de toda la organización. Podemos saber a tiempo real cuáles son los números de todos los centros (beneficios, gastos, deudas y todo un complejo cuadro de mandos con las principales magnitudes de gestión de toda la organización). Esto nos permite tomar decisiones de manera empírica y no por intuición”, aclara Trujillo. “Esto ha provocado un nuevo enfoque y un cambio en el modelo de trabajo en los distintos niveles de los servicios que presta SAMU en todas sus áreas y departamentos, en España y fuera de España”.

A partir de ahí, SAMU empezó a elaborar indicadores básicos de gestión (KPI’S) y unas métricas cuantitativas que muestran cómo una empresa progresa hacia sus objetivos empresariales más importantes.

“Las cuentas de resultados, la posición de cada uno de los centros y áreas y sus resultados y sus ranking y la gestión de las deudas en clientes y proveedores representan algunos ejemplos de este cambio y del proceso de transformación que de forma imparable llevamos a cabo. Ha costado mucho ponerlo en marcha, pero ahora tenemos un sistema que nos dice a tiempo real cuál es la situación de cada centro a un nivel de detalle extraordinario”, continúa José Antonio Trujillo. “Esto no es el futuro. Es algo esencial de lo que SAMU carecía”.

A raíz de este nuevo sistema general de gestión, que está en continua actualización, se han ido desarrollando otros sistemas según las necesidades de cada centro o departamento y la información que estos necesitaban saber de su actividad. “Ahora, por ejemplo, estamos desarrollando uno para datos laborales, datos de absentismo, datos para costes de personal versus ingresos…”, destaca el director general adjunto.

Lo que se pretende es que toda la transformación digital de SAMU sea circular, es decir, que todos los sistemas estén vinculados con todos y haya cruce de datos.

“Esta ha sido la primera fase del plan de digitalización de SAMU y el esfuerzo más grande que hemos hecho en 2023”, comenta Trujillo.

También se han desarrollado otras herramientas, como un sistema de ticketing o de seguimiento de incidencias que relaciona usuarios con departamentos. De este modo, ya no se atienden llamadas para resolución de incidencias.

Reedición de SAMS

Por otro lado, se ha seguido trabajando en SAMS (SAMU Advanced Management System), un sistema de gestión integral desarrollado por la propia entidad en 2018 con el principal objeto de permitir un registro sistematizado y exhaustivo de todas las intervenciones en los servicios en el complejo universo de actividades de SAMU.

Este sistema se creó pensando exclusivamente en el área de Dependencia e Inclusión Social, pero pronto se unieron otras áreas como Infancia y Familia, Emergencias o Salud lo que generó problemas de concepción y de nomenclaturas. El sistema requería evolucionar al mismo ritmo que lo hacía la propia organización, que no ha parado de crecer en los últimos años.

Así, en julio de 2023, se inició el proyecto SAMS 5.0, una reedición de este sistema que cuenta, a su vez, con sistemas diferentes según las áreas operativas y sus necesidades. “Hemos cambiado el modelo de trabajo. Ahora es el usuario el que indica lo que necesita para su gestión diaria y el programador adapta al sistema la implementación requerida”, cuenta Trujillo.

“SAMS es una base de datos central única. Es el sistema de gestión del servicio de SAMU. Aquí están las fichas de los usuarios con sus diarios de actividades e historiales, la historia social de los menores con sus evoluciones o de los pacientes de las residencias de personas dependientes”, explica el director general adjunto. “De SAMS se están sacando utilidades que no están relacionadas con la gestión de personal y se está llevando a nuestra nueva Intranet”.

SAMU entiende su Intranet, otro de los proyectos desarrollados en 2023, como un lugar de obligado uso y paso para toda la organización para trabajar. Aquí están todas las áreas representadas, el directorio de centros, el sistema de facturación, comunicación, calendario laboral. “Lo que hace la Intranet es vincular por detrás numerosas aplicaciones y herramientas y servir de nodo entre diferentes sistemas”, comenta Trujillo.

“Ahora, nuestro mayor reto es conseguir que SAMS camine hacia la plena integración de todos los sistemas propios y su interoperatividad con los sistemas de las Administraciones Públicas, lo que supondrá una simplicidad enorme a la hora de reportar datos en ámbitos tan sensibles como la atención a la discapacidad o la protección de menores. Este proceso debe estar concluido a finales de 2024”, continúa el director general adjunto. “El año 2023 ha sido muy productivo”.

Proyecto SAMU ORIÓN

En las últimas semanas se han producido importantes cambios en la dirección de SAMU, entre los cuales se encuentra la creación de la dirección de Innovación e Implantación Digital, que ha sido asumida por Almudena Chávez. “El cometido principal de esta nueva dirección es la implantación total y obligatoria de SAMS y del resto de herramientas, así como la coordinación de las necesidades de las áreas con nuestros proveedores tecnológicos. Esto va a culminar en la creación de un departamento TIC propio en 2025, cuando ya esté todo rodado”, confirma Trujillo.

De esta nueva dirección nace la Comisión de Transformación, órgano en el que están representadas todas las áreas de SAMU y los proveedores (OGA e Inside Business Advisor) y que trabajará en la estrategia de generar procesos y en el impulso hacia el uso de las herramientas digitales y los desarrollos que SAMU va adquiriendo, todo ello en un contexto de integración circular entre todos los sistemas existente y los desarrollos que están por venir.

Todo este proceso de transformación digital y los numerosos cambios realizados y herramientas y aplicaciones desarrolladas evolucionan hacia la segunda fase de todo este plan que ha sido bautizado con el nombre de SAMU ORIÓN.

“SAMU ORIÓN es el proyecto global de digitalización de SAMU y aquí es donde vamos a pasar a la tecnificación y digitalización de los servicios de SAMU. ¿Y esto en qué se traduce? Pues en generar un sistema de identificación biométrica en los centros para la identificación de los menores, por ejemplo, o, a través de la Inteligencia Artificial poder identificar su edad; se traduce en la domótica en los centros de dependencia aplicada a los cuidados y a los modelos predictivos, o en la generación de un Data-Lake operativo y transversal, entre otros proyectos”, explica Trujillo.

Los objetivos de SAMU ORIÓN se dividen en dos grandes bloques: por un lado, principales necesidades en la transformación digital de SAMU en cuanto a herramientas y funcionalidades internas; y, por otro lado, tecnología aplicada a los servicios y diseño de nuevos productos en salud y servicios sociales y la constante evolución de SAMS.

Otros objetivos comunes son la digitalización aplicada a la mejora e innovación de los servicios que ya presta Fundación SAMU desde la automatización y optimización de los mismos aplicando el estado del arte de las tecnologías actualmente disponibles; y la conceptualización y desarrollo de nuevas soluciones y servicios digitales disruptivos y de alto impacto y valor para los usuarios finales y las Administraciones Públicas entendidas como target de SAMU y siempre bajo el paradigma del recorrido del data-driven.
En este sentido se han diseñado hasta 30 oportunidades de desarrollo, de los cuales 10 de ellos pretenden ser abordados en 2024.

Una de estas oportunidades de desarrollo mencionada y que adquiere una gran relevancia es el Data-Lake. “A la Administración Pública le interesa mucho la gestión de nuestros datos. Le podemos dar información sobre cómo va a evolucionar el flujo migratorio en Canarias, por ejemplo. Lo que vamos a hacer es ordenar todos los datos que tenemos y sistematizarlos, generando así sistemas que nos ofrezcan consultas de datos y modelos predictivos como un valor añadido y diferencial”, explica José Antonio Trujillo.

Otras oportunidades de desarrollo son el reconocimiento de usuarios menores mediante datos biométricos por visión artificial, predicción del absentismo escolar, digitalización de la predicción de reingreso a centros, la optimización del servicio de transportes de usuarios, predicción de consumos, optimización de rutas para cuerpos de seguridad con restricciones específicas, la optimización del calendario laboral de los diferentes centros de SAMU para asignación de turnos y la traducción de lenguaje de signos mediante una aplicación móvil con avatares de inteligencia artificial.

La gran mayoría de estos proyectos están pensados para favorecer y mejorar el desarrollo de SAMU, pero, por otro lado, son desarrollos exportables a disposición de otras organizaciones y de los clientes de SAMU.

Jara Díaz Vázquez: “Todos los días deberían ser 8M”

La trayectoria profesional de la socióloga Jara Díaz Vázquez (Fuentes de Andalucía, Sevilla, 1989) siempre ha estado vinculada a colectivos vulnerables. Llegó a SAMU por primera vez en 2018 y regresó en 2023 como técnico de proyectos del área de la Mujer de SAMU.

—Su trayectoria profesional en SAMU tiene dos etapas: la primera en 2018 y la segunda cuando decidió regresar en 2023. ¿Por qué decidió marcharse la primera vez?
—Llegué a SAMU por primera vez en 2018 tras finalizar el proyecto Espacios Comunes del Ayuntamiento de Sevilla, el cual coordinaba. Trabajé en el departamento de Desarrollo pero, en aquel momento, sentía que me faltaba práctica y, aunque disfrutaba con los proyectos, tenía la necesidad de estar en el terreno, de ponerle rostro a las personas a las que se dirigían los proyectos que redactaba. Así fue como llegué a la intervención social. Me alegra mucho poder contar con esa experiencia, pues me ha permitido crecer tanto a nivel personal como laboral. Creo que es muy necesaria la experiencia en el terreno cuando te dedicas a elaborar proyectos, pues aprendes que detrás de los datos siempre hay rostros de personas.

—¿Por qué decidió volver a SAMU?
—Fue a principios de 2023. Llevaba cinco años trabajando como técnica de acogida en la CEAR (Comisión Española de Ayuda al Refugiado) y, en aquel momento me encontraba en un punto de inflexión en mi vida, que coincidió con la maternidad, algo que todos sabemos que te cambia la vida. Trabajar en la CEAR, aparte de una implicación mental, requiere una implicación humana y un gran compromiso que, en ese momento, con mi hija tan pequeña y las pocas horas de sueño de las que disfrutaba, me suponían un desafío más que una satisfacción. Tras cinco años en la CEAR empecé a plantearme la vuelta a los proyectos. Sentía que necesitaba un cambio en la metodología de trabajo, un trabajo más de pensar, redactar, reflexionar. Fue entonces cuando me enteré de que había una vacante en SAMU como técnica de proyectos. Además, aquí me reencontré con Conchi Pérez como directora del área de Intervención Socioeducativa y de la Mujer. Ya había coincidido con ella en SAMU, lo cual me dio mucha alegría. De hecho, quiero aprovechar para agradecerle a Conchi la confianza que depositó en mí y la oportunidad que me dio. También por su apoyo y confianza en el día a día, pues así lo complejo se hace más simple.

—¿Cómo ha evolucionado el área de la Mujer desde su puesta en marcha hace relativamente poco tiempo?
— Cuando regresé a SAMU, este área estaba ya funcionando. Tenían varios proyectos pendientes de ejecutar, que eran en su totalidad proyectos nacionales. La principal evolución que ha experimentado esta área ha sido que el foco de atención se ha puesto en la intervención social, en lograr servicios propios dirigidos a mujeres en situación de vulnerabilidad (migrantes, embarazadas sin recursos, etcétera). También, en los últimos meses se está trabajando en la presentación de proyectos a convocatorias con fondos europeos. Es complicado comenzar desde cero en la gestión de servicios de intervención social con mujeres, pero creo que vamos por el buen camino. Actualmente hemos presentado diferentes proyectos y estamos a la espera de resoluciones. Algunos de estos proyectos son Resurge Mujer, Programa Nido o Vínculos.

—¿Cuáles han sido las principales dificultades que os habéis encontrado en este camino?
—La solvencia. Hay que tener en cuenta que es un área de reciente creación. A veces también nos hemos quedado fuera de algunas convocatorias porque en los estatutos no aparecía específicamente algún ámbito de actuación.

—¿Cuál es el gran reto del área de la Mujer de SAMU?
—Nuestro gran reto es contar con servicios propios de intervención social dirigidos a mujeres. Estos servicios abarcan diversos ámbitos, desde la inserción sociolaboral hasta la atención integral a mujeres víctimas de violencia de género o trata de personas, así como programas orientados a promover una parentalidad positiva.

—¿Qué aspectos de la organización cree que deberían cambiar o mejorar para conseguir este gran reto?
—Desde aquí pido que sigan apostando por el área de la Mujer, que confíen en nosotras. Es complicado arrancar, los inicios suelen ser así, pero lo conseguiremos. Hemos desarrollado proyectos que han tenido muy buena acogida por parte de diferentes organizaciones y donantes, solo nos falta un poco de tiempo.

—Coincidiendo con el mes de marzo, me gustaría preguntarle por qué es para usted importante el 8M.
—Para no olvidar. Es una fecha en la que pienso en todas las mujeres, pero principalmente en las oprimidas, en las que viven en situación de más precariedad, en las que se ven obligadas a migrar. Pienso en las mujeres de la fresa de Huelva, en las mujeres sin hogar, en las que no pueden conciliar. En las mujeres palestinas. Todos los días deberían ser 8M, pero, al menos, cuando aparece en el calendario sabes que es un día en el que la lucha colectiva se extiende a todas. La rabia y el coraje se transforman en unión y recordamos que, aunque estemos cambiando el mundo, aún nos queda mucho camino por recorrer juntas. Para mí este día viene cargado de emociones. Es un día de salir a la calle, de estar juntas, de compartir. Me siento muy cómoda en los espacios que se forman en torno al 8M, no importa que no conozca a nadie. Cualquier mujer en estos espacios puede decir que se siente arropada. Y libre.

—¿Hizo huelga el pasado 8 de marzo?
—Sí, al igual que en años anteriores. Mi razón para hacerla este día es la movilización a nivel mundial, la visibilización que se le da ese día al trabajo de las mujeres. ¿Qué pasaría si un solo día, sólo uno, paramos todas? No sólo en el ámbito laboral, sino en otros espacios y trabajos, como los cuidados, el consumo. Pero no todas podemos permitirnos parar ese día o no a todas se nos permite hacerlo. Por otro lado, respeto la decisión de aquellas mujeres que deciden no hacer huelga. Lo respeto y lo entiendo. Y las apoyo. Por eso tenemos que seguir saliendo a la calle, por las que no pueden. Y por las que no están porque el machismo les quitó la vida. También por las que vendrán.

—¿Cómo se ha celebrado en SAMU el 8M?
—Hemos querido desarrollar una acción interna en la que pudiéramos involucrar a cualquier persona de la plantilla, incluso en la distancia. Por esta razón, hemos elaborado un mural colectivo bajo el lema ¿Qué es para ti el feminismo? La idea era crear un espacio abierto en el que cada persona pudiese expresar sus ideas y sentimientos sobre el feminismo a través de cualquier forma de arte, y que esto pudiese llevar a la reflexión colectiva sobre el feminismo en nuestras vidas. El mural estaba ubicado en la sede central de SAMU, en la isla de la Cartuja, en Sevilla.

—¿Cómo han respondido los trabajadores a esta actividad?
—La participación ha sido elevada. En el mural se han plasmado frases, collages, fotografías, canciones, incluso una camiseta… Nos han llegado aportaciones de trabajadores que no se encuentran físicamente en la isla de la Cartuja, como por ejemplo murales elaborados por las personas usuarias de otros centros. Son maravillosos y me gustaría aprovechar para darles las gracias. Este mural lo digitalizaremos para poder utilizarlo en cartelería, como portadas de proyectos, trípticos…

—Y para usted, ¿qué es el feminismo?
—Hace tiempo que pienso en el feminismo del día a día, el feminismo de la cotidianeidad. Para mí el feminismo es mi abuela vendiendo huevos para que mi madre y mi tío pudiesen ir al colegio; es mi madre dando clases de Sevillanas para pagarse la carrera de Magisterio; o las abuelas que cuidaban a sus nietas y a su vez asistían al programa de Empleo que desarrollamos en Ceuta. Al hablar de feminismo se me vienen a la mente nuestras ancestras, y el día a día de esas personas que no han sido consideradas referentes y que han luchado tanto por lo que somos ahora. También es feminismo una entidad como SAMU que apuesta por proyectos enfocados en la mejora de la calidad de vida de las mujeres, o donde más de la mitad de los cargos directivos los ocupan mujeres. Allí donde se luche por la igualdad de derechos, ahí hay feminismo. Desde el derecho a la educación a los derechos sexuales y reproductivos, la libertad de circulación o a caminar por la calle sin miedo.

Juana Macías, presidenta del ISIC y directora de la Academia SAMU: “Aquí he conocido a personas con talento y muy valiosas”

Juana Macías Seda (Sevilla, 1959) proviene del mundo universitario y está vinculada a SAMU desde sus orígenes. En febrero de 2021, la dirección general de la entidad le propuso liderar dos nuevos proyectos: el Instituto SAMU de Investigación Científica y la Academia SAMU.

— El Instituto SAMU de Investigación Científica (ISIC) acaba de cumplir tres años. ¿Por qué se decidió poner en marcha?
—SAMU tiene una larga trayectoria en la prestación de servicios sociosanitarios, pero su producción y divulgación científica no está acorde con esta larga trayectoria. Así, el Instituto SAMU de Investigación Científica surgió en 2021 con el fin de potenciar la investigación, promover las tesis doctorales entre los profesionales de SAMU y divulgar, difundir y dar una estructura científica a lo que se viene haciendo en la organización desde hace años. El ISIC intenta da respuesta al interés de tener un corpus científico en SAMU y, con ello, conseguir que SAMU consiga ser Agente del Conocimiento en Andalucía. Esto supondría un aval a la hora de solicitar proyectos científicos. Sin ser Agente del Conocimiento es muy difícil que a SAMU le concedan ningún proyecto de investigación como entidad independiente.

—¿Cuándo empezó SAMU a interesarse por la investigación?
—En realidad, SAMU empezó a investigar sobre temas de emergencias en el año 1981. La primera UVI móvil no era una UVI móvil sanitaria al uso, era una unidad de investigación operativa en emergencias. El jefe, don Carlos Álvarez Leiva, que es una persona visionaria, ya impulsó a principios de los 80 la investigación en temas de emergencias prehospitalaria provocando un cambio de paradigma y de modelos asistenciales que luego han dado lugar a la profesionalización en el sector de las emergencias.

—Además de convertir a SAMU en un Agente del Conocimiento, que es una meta a largo plazo, ¿cuáles son los otros objetivos del ISIC que permitirán lograr esa objetivo final?
—Los objetivos fundacionales del ISIC incluyen impulsar proyectos de investigación en los campos de la salud, bienestar social y educación; aglutinar y coordinar la actividad investigadora y de divulgación científica ya existente en SAMU; y publicar libros científicos y facilitar la publicación de artículos de SAMU en revistas indexadas. Además, contempla como objetivo potenciar la participación de sus miembros en grupos de trabajo relacionados con la investigación y el desarrollo, como por ejemplo el Comité de Innovación, la Cátedra SAMU de Innovación Social.

—¿Cuáles son las acciones que se han proyectado en estos tres años de vida del ISIC?
—Por un lado, está la activación de la Cátedra de Innovación Social de SAMU con la Universidad Pablo de Olavide (UPO), un proyecto de colaboración que tiene tres grandes líneas de trabajo: investigación, divulgación y acción social a través del voluntariado. Por otro lado, contamos con un programa de doctorando llamado Mentoring Doctorando, que tiene como objetivo principal incrementar el número de profesionales de SAMU con tesis doctorales. Consiste en un programa de acompañamiento y asesoramiento a aquellos profesionales de la organización que tienen perfil o interés para hacer su tesis doctoral. En 2022, en la primera edición de este programa de doctorado, unos seis profesionales mostraron interés, pero sólo uno de ellos entró en un programa doctoral en la Universidad Pablo de Olavide. En 2023, fueron 15 los profesionales de SAMU con interés en hacer su tesis. De ellos, nueve profesionales han accedido a un programa doctoral: seis en la UPO, dos en la Universidad de Sevilla (US) y uno en la universidad de Granada (UGR). Como ejemplos tenemos a María Casado, que está realizando su tesis en temas de salud mental y bienestar emocional; Alba Garrido Gata, que profundiza en el sinhogarismo y las soledades no deseadas; Jara Díaz en la temática de migraciones y perspectiva de género; o Roberto Alconada, psicólogo de la clínica de salud mental SAMU Wellness, que realiza sus tesis doctoral sobre el suicidio. Por otro lado, Juan Luque Pelegrin y Laura García Rebolo están trabajando en temas de migración y Almudena Chávez, directora de la Unidad de Estancia Diurna San Lucas, que investiga sobre temas de discapacidad. Cabe señalar que al comienzo del ISIC, SAMU sólo contaba con cuatro doctores y actualmente ya contamos con ocho profesionales con tesis doctorales finalizadas.

—¿Qué otras acciones tiene en marcha el ISIC además de la Cátedra de la UPO y el Mentoring Doctorando?
—Hemos creado una Comisión Ética, pues identificamos que numerosos investigadores solicitaban a SAMU frecuentemente colaboración para acceder a muestras de personas migrantes o personas con discapacidad, principalmente. El carácter expansivo de la organización SAMU con el correspondiente incremento en la plantilla de profesionales, residentes y estudiantes conllevan una intensa actividad asistencial e investigadora. Ello genera un Big Data que resulta ser muy atractivo para un gran número de investigadores e instituciones académicas. Ante esta situación el ISIC activó la Comisión de Ética para dar cumplimiento a la legislación en materia de protección de datos personales. El objetivo es establecer pautas básicas de actuación destinadas a garantizar el derecho al anonimato y confidencialidad de los datos de los diferentes colectivos de profesionales, residentes y estudiantes que integran la organización SAMU. Esta Comisión actúa como un órgano consultivo multidisciplinar y funciona de forma protocolizada con la misión de emitir informes, propuestas y recomendaciones sobre materias relacionadas con las implicaciones éticas de la investigación.

—Tengo entendido que otra de las grandes acciones del ISIC es la Alliance for Migration Research (Alliance 4).
—Sí, su objetivo es facilitar un espacio académico internacional para impulsar las investigaciones relacionadas con las migraciones alrededor del mundo y contrarrestar esa apreciación negativa que existe en torno a la migración. Este proyecto surgió después de que la American University mostrara interés en los datos que manejaba SAMU First Response con el fin de hacer un mapeo sobre la migración en Estados Unidos. Desde el ISIC hemos llamado a otras puertas como la Universidad Loyola o la Universidad de Granada y, tras varios reajustes, el próximo mes de noviembre vamos a celebrar una reunión de expertos en migración. Tenemos profesionales en Fundación SAMU que están llevando a cabo iniciativas muy innovadoras y de gran calado social y a las que no se le está dando luz. A través de este comité o reunión de expertos queremos compartir estas experiencias con otros expertos e investigadores de diferentes instituciones universitarias.

—¿Y dónde entra la Academia SAMU dentro de todo este entramado?
—La Academia SAMU nace en el 2021 vinculada al ISIC aunque con sus propios objetivos. En concreto, se plantea como espacio y agente de educación superior para la plantilla de SAMU. Su objetivo principal es contribuir a la capacitación de los directivos junior y los jóvenes talentos de la organización para que desempeñen un liderazgo que les permita abordar los retos actuales, como la humanización, la sostenibilidad, la innovación, el bienestar emocional, la excelencia en la calidad de los servicios, las finanzas y la digitalización.

—¿Qué diferencia la Academia SAMU del ISIC?
—Mientras que el ISIC se basa en la investigación, la Academia SAMU se centra en la formación. Además del Experto en Desarrollo Directivo que es la formación estrella, la Academia tiene un programa para instruir a los jóvenes talentos directivos dirigido a profesionales cuyos responsables de área o responsables de centro han identificado que tienen capacidad para gestionar pero no han ejercido como tal. Con este fin, organizamos por primera vez en marzo 2023 el curso intensivo de gestión del talento en formato durante tres días en un pueblo remoto de Huelva.

—¿Qué aspectos deben mejorar para que el ISIC y la Academia SAMU continúen avanzando?
—Es necesario mejorar la financiación presupuestaria para llevar a cabo la formación y la investigación y, sobre todo, la difusión y coordinación del talento pedagógico y científico de los profesionales de SAMU.

—¿Por qué decidió ponerse al frente del ISIC y de la Academia SAMU? ¿Qué le motivó a hacerlo?
—Yo procedo del ámbito universitario y, por otro lado, estoy vinculada a SAMU desde los inicios de la organización. Cuando la Dirección General de SAMU me planteó las necesidades existentes, tanto de formación como de investigación, la verdad es que me ilusioné con el proyecto. Me ilusiona poder trasladar mi experiencia como investigadora universitaria y poder contribuir para que en SAMU se vaya consolidando esta capacitación y este corpus científico. Además, tengo el valor añadido de conocer la institución muy bien desde dentro, así como sus necesidades académico-científicas.

—¿Qué le ha aportado el ISIC a nivel personal y profesional?
—Este proyecto me ha enriquecido y ha ampliado mi visión sobre SAMU porque, en los últimos años, he estado bastante desvinculada a la organización. El ISIC me ha permitido conocer la organización más a fondo y su versatilidad, así como colaborar con directores, responsables de áreas y centros que me han aportado vivencias y experiencias motivadoras a nivel personal y profesional. En estos tres años, me he encontrado con personas muy talentosas y tremendamente valiosa que me han mostrado una parte de SAMU poco conocida para mí, y también me han encauzado hacia nuevos proyectos. He conocido a personas muy capacitadas y con una gran experiencia en determinadas materias. En definitiva, he podido conocer a gente con mucho talento dentro de la organización, que incluso ellas mismas no eran conscientes o no tenían la percepción de su conocimiento y valor.

Tres años de investigación científica en SAMU

El Instituto SAMU de Investigación Científica (ISIC) cumple este mes de febrero su tercer año de vida. Fundación SAMU puso en marcha este órgano que aglutina todos los proyectos de investigación en materia de salud, servicios sociales y nuevas tecnologías de SAMU en febrero de 2021. Se activó con el propósito de recopilar, producir y transferir las iniciativas, proyectos e investigaciones que se realizan en las diferentes áreas funcionales de SAMU, además de Escuela SAMU y la clínica de salud mental SAMU Wellness. Este proyecto se ha visto fortalecido gracias a los convenios de investigación firmados con diversas instituciones académica, entre ellas la Universidad de Sevilla, la Universidad Loyola o la Universidad Pablo de Olavide.

“SAMU ha demostrado una excelente motivación investigadora desde sus inicios en 1981 con el Grupo de Investigación Operativa del área de Emergencias. Asimismo, destaca su amplia producción científica a lo largo de sus 35 años de postgrado universitario con una producción de más de 1.300 trabajos académicos”, explica Maribel Álvarez Leiva, directora del área Hospitalaria de SAMU.

“SAMU tiene como objetivo convertirse en Agente del Conocimiento en Andalucía y en figuras análogas en otras comunidades autónomas. Esto exige demostrar una clara actividad investigadora a través de un órgano propio que aglutinar y transfiera la producción científica generada en sus diferentes áreas funcionales”, continúa Álvarez Leiva.

Los objetivos del ISIC son impulsar proyectos de investigación en los campos de la salud, bienestar social y educación; aglutinar y coordinar la actividad investigadora y de divulgación científica ya existente en SAMU; publicar libros científicos y facilitar la publicación de artículos de SAMU en revistas indexadas; participar en grupos de trabajo relacionados con la investigación y el desarrollo; y favorecer que el profesorado de SAMU pueda tener actividad investigadora con respaldo universitario, entre otros.

Dentro del ISIC, hace ahora dos años, en enero de 2022, nació la Academia SAMU como espacio y agente de educación superior para la plantilla de SAMU. Su objetivo es contribuir a la capacitación de los jóvenes talentos y directivos de la organización para que desempeñen un liderazgo que les permita abordar los retos actuales, como la humanización, la sostenibilidad, la innovación y la digitalización.

El programa de la academia comprende acciones formativas de diferentes niveles y temáticas en formato de cursos, seminarios, talleres y/o eventos académico-científicos. Entre las acciones formativas llevadas a cabo en 2023 destacan el curso de Alta Representación Institucional, en el que participaron 23 directivos y gerentes de todas las áreas de SAMU; y el curso de Excelencia en la Gestión de Servicios y Centros Sociales y Sociosanitarios, en el que ya han participado 87 directivos en sus tres ediciones.

También se ha llevado a cabo una formación intensiva dirigida a directivos noveles o cargos intermedios para identificar y fomentar el talento. Fueron unas jornadas de convivencia en el alojamiento municipal Casa Pingo en Berrocal (Huelva), en las que se pretendía detectar el talento dentro de los directivos noveles e inculcar los valores institucionales. En este curso participaron 14 profesionales de SAMU.

Hay que sumar las I Jornadas Internacionales sobre Experiencias e Iniciativas en Innovación Social, en las que participaron 372 personas de manera telemática, y la reunión plenaria anual de jefes y directores que congregó a 104 personas.

Con respecto a la formación externa, destacan el Curso de Voluntariado en Emergencias Sociales a través de la Cátedra de Innovación Social SAMU y la Universidad Pablo de Olavide; y el curso de Autocuidado y Hábitos de Vida Saludable organizado por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).

Este año, la Academia SAMU también ha impulsado el desarrollo de cinco proyectos: el programa Lazos, que tiene como finalidad aumentar las redes de apoyo en personas con trastornos mentales a través de actividades lúdicas y culturales; un proyecto de investigación acerca de las personas sin hogar; un mapeo del perfil de salud mental y bienestar emocional del alumnado universitario; el proyecto Soledad No Deseada, que nace de la unión de la Fundación Curar y Cuidar y la Fundación SAMU con el objeto de trabajar en el estudio de la soledad no deseada entre las personas mayores; y otro que evalúa la eficacia en el manejo de la silla de ruedas desde la perspectiva del cuidador y la carga mental que genera.

Academia SAMU, además, cuenta con un programa de doctorado, Mentoring Doctorando, que tiene como objetivo principal incrementar el número de profesionales de SAMU con tesis doctorales. En 2023, 18 profesionales de SAMU de diferentes áreas participaron en este programa.

Cátedra de Innovación Social

Otro de los grandes proyectos impulsados por el ISIC ha sido la creación de la Cátedra de Innovación Social junto con la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla. Su objetivo es establecer un marco de colaboración para el desarrollo del conocimiento en el área sociosanitaria a través de la innovación social. Esta cátedra permite llevar a cabo actividades de formación, tanto reglada como no reglada, y promover la cooperación educativa entre ambas entidades para la mejora de la empleabilidad de los estudiantes. Está prevista la concesión de becas, ayudas y premios.

En investigación, se impulsa el desarrollo de nuevas líneas de trabajo relacionadas con la innovación social del tercer sector y la elaboración de informes y estudios en los ámbitos de la salud y la acción social. Uno de los proyectos desarrollados es un mapeo del perfil de la salud mental y el bienestar emocional de los universitarios.

Entre las actividades celebradas en 2023 destacan las I Jornadas Internacionales sobre Experiencias e Iniciativas en Innovación Social (23, 24 y 25 de febrero de 2023) dirigidas a profesionales del ámbito sociosanitario. Participaron 174 personas. Se presentaron 19 comunicaciones en formato póster y 33 comunicaciones orales, 21 ponencias y 2 conferencias magistrales.

También se celebró el curso de Voluntariado Universitario en Emergencias Sociales del 31 de enero al 14 de febrero.

Alliance 4

El ISIC también lidera la iniciativa internacional Alliance for Migration Research (Alliance 4), que goza de acuerdos con universidades de Europa, Estados Unidos y América Latina. Está financiada por Fundación SAMU y su filial en Estados Unidos, SAMU First Response, y su objetivo es facilitar un ambiente académico internacional para impulsar las investigaciones relacionadas con las migraciones alrededor del mundo y su impacto en las naciones anfitrionas. universidades, administraciones públicas, empresas y organizaciones benéficas pueden unirse a esta alianza para la investigación sobre migraciones de forma gratuita. Profesores, médicos y estudiantes de doctorado también podrán postularse de manera individual.

Entre las líneas iniciales de investigación destacan el impacto económico de la migración, la salud mental y emocional de los inmigrantes, la perspectiva de género, menores inmigrantes, mejores prácticas de los servicios sociales, racismo o la migración como factor de reducción de la pobreza y desarrollo, entre otros.

Ya han confirmado su presencia en la alianza American University, a través de su Centro de Estudios Latinoamericanos y Latinos (Washington DC, EE.UU); ISIC (Sevilla, España); CISDE-Campus Internacional para la Seguridad y la Defensa (Sevilla, España); y la Universidad Pablo de Olavide, a través de la Cátedra de Innovación Social (Sevilla, España). Y hay una treintena de entidades e instituciones de todo el mundo invitadas a la reunión de lanzamiento prevista para el 16 y 17 de octubre de 2024 en Sevilla.

Convención anual de directores: Los retos ya están aquí

Un centenar de directores y subdirectores de áreas, directores de centros y coordinadores de proyectos de SAMU y Fundación SAMU de todo el país participaron el 15 y 16 de noviembre en la convención anual de directores de SAMU, que este año llevaba por título Hacia la transformación digital. En esta ocasión, el evento se celebró en el Hotel Ilunion Alcora de San Juan de Aznalfarache (Sevilla).

El objetivo principal de esta reunión, aparte de un encuentro entre todos los directores, era exponer el presente y futuro de SAMU, hacia dónde va la entidad con la transformación digital y reforzar con talleres las nuevas tecnologías desarrolladas en los departamentos de finanzas, gestión de personas, motivación y comunicación.

Esta convención ha estado financiada por los fondos europeos Next Generation. En concreto, su desarrollo ha sido posible gracias a la concesión a Fundación SAMU, por parte de la Dirección General de Diversidad Familiar y Servicios Sociales, de la subvención para el apoyo a la modernización de las entidades del tercer sector financiadas a cargo del Fondo Europeo de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

En las jornadas participaron 78 profesionales de forma presencial y 20 de manera telemática, estos últimos debido al estado de emergencias de entrada de menores migrantes en Canarias. Esta situación impidió que los directores y coordinadores de los diferentes centros y programas pudieran desplazarse a la Península. También se invitó a una docena de profesionales que colaboran con SAMU en su proceso de transformación digital.

El programa estaba compuesto por tres sesiones plenarias: Valores y estrategias de SAMU 2030, a cargo de José Antonio Trujillo, director general adjunto de SAMU; Claves de un proceso de transformación digital, a cargo de José Ruiz de la Sierra, CEO de INSIDE Business Advisors; y Bioética y nuevas tecnologías, que impartió Federico Alonso Trujillo, especialista en Bioética y facultativo médico de la Administración General de la Junta de Andalucía.

El programa también contemplaba cinco talleres simultáneos en los que fueron rotando todos los participantes (Gestión de personas en la era de la digitalización, Finanzas en la era digital, La excelencia técnica desde la planificación, Motivación al logro y Comunicación interna) y una mesa redonda en la que se habló sobre el presente y el futuro de SAMU. Los ponentes de esta última actividad fueron Juan González de Escalada, director del área de Emergencias de SAMU; Concepción Pérez, directora del área de Intervención Socioeducativa y de la Mujer; María José Tinoco, directora del área de Dependencia e Inclusión Social; Enrique Yrazusta, consejero jurídico de la presidencia de SAMU; y Juan Manuel Aveledo, director del área de Infancia y Familia.

El evento comenzó con la recepción de los participantes y una bienvenida y presentación de la jornada a cargo de Carlos González de Escalada, presidente-director general de SAMU; José Antonio Trujillo, director general adjunto de SAMU; María Luisa Moya Tejera, alcaldesa del Ayuntamiento de San Juan de Aznalfarache; José María Villadiego Sánchez, director del Servicio Provincial 061 Sevilla; y Juan Carlos Manzano, director regional de Dentaid.

A continuación, tomó la palabra José Antonio Trujillo, encargado de dirigir la primera sesión plenaria de la convención: Valores y estrategias de SAMU 2030. Durante su intervención, el director general adjunto de la entidad recordó las principales claves del Plan Estratégico 2030, “una hoja de ruta muy ambiciosa” que SAMU comenzó a plantearse hace dos años y que “camina hacia la profesionalización, la erradicación de las fronteras y la internacionalización de nuestra actividad y, por supuesto, hacia la transformación digital”, destacó. “En SAMU casi nada ocurre por casualidad. Tenemos un plan. Y este es un proyecto de todos y para todos”.

José Antonio Trujillo también hizo hincapié en el valor de cada uno de los trabajadores de SAMU y en su talento. “Necesitamos tener a los mejores en cada sitio”, señaló. “Y es una responsabilidad de esta organización sacar lo mejor de cada uno de los profesionales de esta casa y poner el talento a disposición de este extraordinario proyecto”.

El director general adjunto tuvo palabras de agradecimiento hacia todas aquellas personas que le rodean. Desde el propio presidente-director general, que confió en él cuando llegó a SAMU, hasta cada uno de los directores de áreas y todo aquél que habia hecho posible la celebración de la convención. “Somos un equipo, pero no simplemente porque trabajamos juntos. Somos un equipo porque compartimos nuestros problemas y nos ayudamos. Nos tenemos consideración unos a otros y vamos integrando en el equipo el devenir de la organización no como un problema individual que yo tengo, sino del equipo. Esto forma parte del ADN de SAMU”.

Pero el tema principal de esta ponencia fue la transformación digital de SAMU, algo que se ha convertido “en una necesidad”. “No se trata de ir hacia la transformación digital, sino que ya estamos en la transformación. Esto no es un capricho, es una necesidad. Es un hito de supervivencia. Es un tren en marcha y todo va tan rápido… Y esto no solo ocurre en las entidades del llamado Tercer Sector, sino en todo el tejido empresarial”, manifestó Trujillo. “Todo avanza de una manera hiperveloz y no tenemos más remedio que unirnos a esta nueva forma de dirigir una organización tan compleja como SAMU ayudándonos de nuevas herramientas, nuevos procedimientos y nuevas prácticas, y así mantenernos en la vanguardia”.

Trujillo recordó a los asistentes que SAMU es un referente en el sector, pero que aún la entidad “tiene mucho que decir, que explorar y muchas puertas a las que llamar”. Y tampoco quiso dejar atrás en su discurso la importancia de la profesionalización: “La profesionalización no es una opción, es una necesidad imperiosa por la complejidad de nuestro negocio y del mercado en general”.

Durante el resto de la jornada se desarrollaron las otras dos sesiones plenarias, la mesa redonda y los diferentes talleres que estaban dirigidos por Macarena Moreno, directora del departamento de Personas y Talento de SAMU; Iván Díez, coordinador TIC de INSIDE Business Advisors; María José Tinoco, directora del área de Dependencia e Inclusión Social; Concepción Pérez, directora del área de Intervención Socioeducativa y de la Mujer; y Jordi García Quintanilla, consultor y mediador, además de profesor de la Universidad Loyola Andalucía.

Ya en el acto de clausura tomó la palabra Carlos Álvarez Leiva, presidente fundador de SAMU, que este año ha cumplido su 42 aniversario.

“El trabajo de un fundador no siempre es sencillo porque, a veces, uno tiene la sensación de, como le ocurre a la cometa, se eleva, se distancia, se va, se pierde ¿Dónde estoy? ¿Dónde está la empresa? ¿Hacia dónde vamos? El fundador tiene la responsabilidad de tener el hilo de la cometa para que nunca pierda ni su rumbo ni sus valores. Y ese es mi trabajo, y lo hago hoy, más que nunca, lleno de orgullo, de satisfacción y viendo cómo junto a mis hijos y mi familia hemos sido capaces de reunir a una gente como cada uno de vosotros. Con tantos kilates. Para llevar a cabo esta obra tan transcendental, tan impresionante, tan imponente con la que somos capaces de llegar a tanta gente vulnerable. Mi primera enhorabuena es a todos vosotros”, manifestó el doctor Álvarez Leiva.

“Queridos, no podemos tener transformación digital sin transformación familiar. Lo tenemos que llevar todo adelante. Somos una empresa familiar. No sabéis los problemas, las ventajas y los inconvenientes que esto supone. Pero somos una familia, por ello no puede haber transformación digital sin transformación familiar. Juan, ese tiene que ser nuestro reto y en eso estamos comprometidos”, destacó el presidente haciendo referencia al discurso de José Antonio Trujillo y dirigiéndose directamente a uno de sus hijos, presente en el acto de clausura. “Esto es una clausura. Clausurar y cerrar. Y cuando uno cierra hay cosas que quedan dentro y cosas que quedan fuera. La familia de sangre ya va a quedar fuera. Estamos en un proceso de profesionalización y vamos a trabajar en ello, yo el primero”, señaló Álvarez Leiva en alusión al futuro de la entidad y el vínculo de su familia con la misma.

El fundador de la organización destacó durante su intervención las diferentes ponencias y exposiciones pronunciadas durante la convención. “Me siento tremendamente orgulloso de la cantidad de cosas que aquí se han dicho en estos dos días. De la cantidad de personas y de la cantidad de vidas a las que llegamos. He encontrado cosas nuevas que me han llamado la atención. No sabía lo que era el KPI. Bueno, ya me he enterado. También de la minería de la información con la que trabajamos. Me ha sorprendido que ya la inteligencia artificial está casi rayando en la Antigüedad. Me han sorprendido, de verdad, cada una de vuestras exposiciones”, relataba. “Pero que no se nos olvide que la transformación digital debe ir acompañada del tacto de los dedos, del acercamiento a las personas, de la humanidad y de la humildad”.

Álvarez Leiva concluyó emocionado su discurso: “Me voy enriquecido, me voy feliz. Estoy orgulloso porque, sin duda, somos, estamos y hacemos”.

María Teresa Ortega: “El Programa Horizontes ya ha beneficiado a unos 100 usuarios”

María Teresa Ortega (Manzanares, Ciudad Real, 1986) entró a formar parte del equipo de SAMU en julio de 2018 como orientadora en el COISL Motril y actualmente es la responsable de la justificación económica IRPF Programas Horizontes de Fundación SAMU

—¿Cuál ha sido su trayectoria en SAMU?
—Comencé a trabajar en SAMU en julio de 2018 para cubrir una baja maternal como orientadora del COISL Motril, especializado en la atención a menores inmigrantes. En septiembre de ese mismo año, me trasladaron al Residencial Básico de Motril, donde trabajé como psicóloga, ya que tengo la licenciatura de Psicología y la diplomatura de Magisterio de Educación Especial. En este recurso también realicé funciones de subdirectora desde septiembre de 2019 hasta enero de 2020. Luego, desde febrero de 2020 hasta abril de 2021 fui directora del Residencial Básico de Motril. Y desde febrero de 2022 hasta la actualidad, soy responsable de la justificación económica IRPF Programas Horizontes.

—¿Cuáles son sus principales funciones actualmente? 
—Mis funciones son llevar al día la facturación correspondiente de las partidas económicas que forman parte del IRPF Programas Horizontes; revisar las cajas de cada uno de los recursos para ver que están correctas y solventar los errores que se han podido cometer; revisar la plataforma SAMS para que la facturación esté al día; realizar el reparto de las cantidades correspondientes a cada partida y a cada recurso para que los presupuestos estén ajustados a la cantidad dada, así como las desviaciones pertinentes para la realización de un gasto más realista; el registro de cada una de las facturas de cada uno de los recursos divididas por partidas; realizar una previsión de gastos y del dinero pendiente para poder justificar la totalidad de la cantidad asignada; y la comunicación y coordinación con la gestoría correspondiente de emitir el informe de auditoría final que justifica la subvención.

—¿Cuándo puso en marcha SAMU los programas de mayoría dirigido a jóvenes migrantes?
—Los programas de mayoría IRPF Programas Horizontes se pusieron en marcha en enero de 2021. Éste es el tercer año que se está llevando a cabo. A parte de los IRPF, SAMU gestiona otros programas de mayoría para jóvenes migrantes que son los JEM y los PACS, pero dichos programas no se desarrollan a través de subvenciones, sino que son contratos de gestión.

—¿Cómo funcionan los programas IRPF?
—Los programas IRPF son subvenciones destinadas a entidades privadas para la realización de actuaciones de interés general para atender fines sociales con cargo a la asignación tributaria del 0,7% impuesto sobre la renta de las personas físicas en el ámbito de las competencias de la Consejería de Igualdad, Políticas sociales y Conciliación. En concreto, dentro de la subvención, nuestro programa de mayoría se enmarca dentro de la línea 1: subvenciones destinadas a entidades privadas para la realización de programas de interés general para atender fines sociales con cargo a la asignación tributaria del 0,7% del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas.

—¿Cuántos programas tiene SAMU actualmente en marcha gracias a esta subvención?
—SAMU cuenta con cinco recursos dentro de la subvención IRPF Programas Horizontes. Los recursos están localizados en Granada, Lucena, Málaga, Sevilla y Algeciras. Los recursos de Granada y Málaga cuentan con 4 plazas; Lucena y Algeciras con 6 plazas; y Sevilla cuenta con 5 plazas destinadas solo a chicas. El resto de los recursos están destinados a chicos. En total son 25 plazas.

—¿Esta subvención tiene un periodo de caducidad?
—Sí, se inician en enero y finalizan en diciembre. Cada año hay que presentar el proyecto cuando sale la licitación para poder llevar a cabo cada ejercicio de manera anual. Una vez finalizado cada ejercicio, disponemos de tres meses para poder justificar dicha subvención y la realizamos mediante un informe de auditoría.

—¿En qué consisten exactamente el programa?
—El Programa de Autonomía Horizontes nace con el principal objetivo de prestar un servicio de orientación, asesoramiento, inserción social y laboral a jóvenes de entre 18 y 25 años que han pertenecido al Sistema de Protección de Menores de Andalucía, en modalidad de Alta Intensidad. El Programa de Alta Intensidad consiste en un piso de autonomía que incluye alojamiento, manutención y una cobertura de las necesidades básicas, así como la atención a las necesidades específicas, siendo estas las que motivan la inclusión de los y las participantes en el Programa. Se presta una atención integral que se traduce en la cobertura de todas las necesidades de las personas jóvenes que, al cumplimiento de su mayoría de edad, tienen dificultades notorias para la vida autónoma en condiciones de igualdad y seguridad.

—¿Cuáles son los objetivos?
—Su misión es promover la inclusión social y laboral del colectivo de jóvenes que han estado bajo una medida de protección de menores de la Junta de Andalucía (acogida inmediata, guarda o tutela), posibilitando su proceso de emancipación y autonomía mediante el desarrollo de sus competencias personales, laborales y sociales, así como su capacitación para la empleabilidad. Todo ello, mediante la realización de acciones que promueven su inclusión social y laboral, previniendo así situaciones de exclusión social, marginación y, como consecuencia, la aparición de conductas delictivas, poniendo en valor, siempre, los factores de protección social. Los factores de exclusión social a los que se enfrentan los jóvenes procedentes del Sistema de Protección de Menores se podrían enmarcar en cinco dimensiones que establecen los indicadores de exclusión social que influyen en la inserción laboral de toda persona, (Olmos Rueda, 2011); las dimensiones institucional, educativa, económica, de salud y de vivienda. El propósito del programa se orienta hacia la mejora formativa, social y profesional de un colectivo considerado en situación de vulnerabilidad, jóvenes con una historia de fracaso académico que presentan dificultades con relación a sus procesos de integración educativa, laboral y social.

—¿Cuántos jóvenes han pasado por este programa desde que se puso en marcha?
—Haciendo un recuento desde 2021 y teniendo en cuenta que hay usuarios que han permanecido más de un año en los recursos y el año pasado teníamos un recurso más en Motril, aproximadamente han pasado por dicho programa unos 100 usuarios. Se tiene en cuenta tanto las altas, las bajas por emancipación y las expulsiones. Actualmente, están sido atendidos por este programa 27 chicos y chicas.

—¿Cuántas personas trabajan en este proyecto?
—En estos programas trabajan siete personas. Están contratadas como técnicos de inserción laboral (TIL).

—¿Cuál es el futuro de los programas de mayoría?
—Se pretende presentar de nuevo el proyecto para poder darle continuidad al programa y mejorar, en la medida en que se pueda, para que cada año se cumplan los objetivos propuestos y se obtengan buenos resultados. Normalmente el pliego sale en agosto.

—¿Qué le ha supuesto personal y profesionalmente participar en el desarrollo de este programa?
—He podido desarrollar una serie de capacidades que no había puesto en marcha anteriormente y he sido capaz de coordinar y dar directrices a un equipo para que se lleve a cabo de forma correcta un proyecto con su correspondiente justificación.

Macarena Moreno. Directora de Personas y Talento de SAMU: “Tenemos que cuidar a las personas que cuidan”

SAMU cuenta desde abril con una nueva directora del departamento de Personas y Talento, Macarena Moreno (Sevilla, 1974), con 20 años de experiencia en empresas de ámbito nacional e internacional.

—Hace poco más de un mes comenzó una nueva etapa profesional en SAMU. ¿Por qué decidió formar parte de esta empresa?
—Yo vengo del sector sociosanitario, que me apasiona. SAMU es un referente en este campo y, por tanto, trabajar aquí es una gran oportunidad si quiero mantenerme en este sector. Además, me motivó a la hora de decidirme el reto de expansión internacional en el que está inmerso SAMU a día de hoy.

—¿Cuáles son sus principales retos y objetivos al frente del departamento de Laboral, Selección, Talento y Prevención a corto y medio plazo? 
—Hay un reto general en el conjunto de la organización que es la digitalización de procesos, y en él también participa esta área. Actualmente, estamos trabajando en la optimización de las herramientas informáticas (principalmente de nóminas) y unificando procedimientos que faciliten la comunicación entre la empresa y los empleados y empleadas.

—¿Y a largo plazo?
—Diseñar políticas que favorezcan la profesionalización de toda la organización, estandarizando procesos y elaborando procedimientos y protocolos que lleguen a todos los trabajadores. En definitiva, alcanzar mayor bienestar de los empleados y su fidelización, y, entre todos, contribuir al éxito de la organización.

—¿Cuántas personas trabajan en el área que usted dirige?
—Actualmente, el equipo está formado por 16 personas. El departamento de Personas y Talento engloba el departamento laboral, que es el que cuenta con una mayor plantilla; el departamento de selección y formación; y el de prevención. Todos juntos atendemos las necesidades de las personas colaboradoras en cualquier etapa de su trayectoria profesional, desde la acogida hasta su desvinculación de SAMU.

—Hace un año se puso en marcha el programa Talento SAMU que apuesta por potenciar las capacidades, habilidades y conocimientos de los trabajadores. ¿Cuáles han sido los logros de este programa en estos meses?
—El programa Talento SAMU es un potente proyecto que busca identificar futuros lideres en la organización y acompañarlos en su camino al desarrollo profesional. Ya se han realizado con éxito actividades formativas que han permitido conocer a grandes profesionales con ganas de seguir creciendo y motivados para iniciar este camino. Este proyecto es como una carrera de fondo, no pretendemos generar bolsas de personas talentosas por si surgen vacantes, sino identificar a los mejores y convertirlos en los líderes del futuro de SAMU.

—Antes de comenzar la entrevista, ha comentado que uno de sus retos es dar visibilidad a las necesidades de los trabajadores. ¿Cuáles son estas necesidades?
—Las personas queremos ser felices en el trabajo y lograrlo debe ser una responsabilidad de los jefes y directivos. No todas las personas tienen las mismas necesidades, por eso, para poder atenderlas, tenemos que conocer al equipo, las diferentes situaciones personales y profesionales por la que pueden estar pasando, y ofrecerles alternativas reales que sean compatibles con la atención a las personas que cuidamos, que también son nuestra responsabilidad.

—¿Qué medidas pretende poner en marcha para conseguir este objetivo?
—Todos los procesos del departamento de Personas están alineados y tienen el mismo hilo conductor: facilitar el día a día en el trabajo. Para ello, vamos a implantar un sistema de comunicación (mensajería instantánea) con el área de Personas, vamos a seguir desarrollando la herramienta SAMS y estamos trabajando para darle contenido al Portal de Empleado. Todos los trabajadores deben tener la misma información y debemos facilitarle el acceso a la misma. Estamos trabajando también para incorporar paquetes de beneficios sociales basados en la retribución flexible.

—La plantilla de SAMU está formada por más de 3.000 personas. En tan solo un año, ha aumentado en un 21,5%. ¿Cómo se gestiona una plantilla tan grande y que ha crecido tanto en tan poco tiempo?
—El problema en la gestión no es solo el crecimiento exponencial, sino la dispersión geográfica, lo cual dificulta los canales de comunicación. Por ello, es fundamental potenciar esas herramientas para que la información les llegue a todos y estandarizar los procesos comunes que están presente en la trayectoria profesional de los trabajadores. Hablamos, por ejemplo, de elaborar un único manual de acogida donde podamos transmitir los valores de SAMU, de establecer un proceso estándar para evaluaciones de desempeño o aplicar el mismo criterio para las promociones internas, entre otros.

—¿Cuál es el principal objetivo de SAMU para 2023 en lo que respecta a la plantilla?
—El objetivo estratégico de SAMU va más allá de 2023. Se ha marcado un plan estratégico correlacionado con la Agenda 2030, con el fin de convertirnos en una empresa referente en el sector sociosanitario a nivel internacional. Para ello, ya se está trabajando, sobre todo desde EEUU, con la presencia del presidente-director general Carlos González de Escalada, buscando lazos de cooperación con socios estratégicos. La consolidación en el corto plazo es necesaria para alcanzar este objetivo.

—El 74% de la plantilla de SAMU está formado por mujeres ¿Cómo influye esto a la organización?
—En SAMU queremos tener profesionales comprometidos y con una marcada vocación de atención a personas vulnerables, y, en esto, las mujeres somos expertas. No olvidemos que el sociosanitario es un sector muy feminizado, ya que tradicionalmente los cuidados a personas dependientes o vulnerables recaían en las madres, hijas o hermanas. Por suerte, cada vez son más los hombres que buscan su salida profesional en este sector, lo que enriquece a la plantilla y al servicio que prestamos.

—En su opinión, ¿qué cree que puede aportar usted a SAMU profesional y personalmente? 
—He tenido la suerte de trabajar en empresas pioneras en la gestión de las personas y también en empresa del sector sociosanitario con una plantilla de 6.000 colaboradores. Esto me ha permitido conocer diferentes formas de hacer lo mismo, lo que me facilita poder adaptar mis conocimientos y experiencia a la particularidad de SAMU. También me considero una persona muy comprometida con la calidad en la atención a las personas vulnerables, y para conseguirlo, a su vez, tenemos que cuidar a las personas que cuidan. A nivel personal, soy una persona cercana, que practica la escucha activa y que apuesto por el sentido del humor en el trabajo.

La empatía como vehículo de aprendizaje

La empatía es un valor esencial y necesario para todas las relaciones interpersonales. El valor de la empatía nos proporciona la capacidad de motivar y encauzar positivamente a las personas. Empatizar es un valor indispensable.

Cuando un menor es acogido en nuestro recurso, el primer sentimiento en ellos es el miedo a lo desconocido. Es entonces cuando debemos comprender qué puede estar sintiendo ese menor y, en consecuencia, implicarnos, ponernos en su lugar y descubrir sus necesidades. En esta tarea debemos emplear diferentes habilidades: observación, atención, escucha activa, expresión de emociones y empatía, en la cual nos centramos en este artículo.

Para que el proceso educativo tenga éxito, necesitamos saber cuáles son las necesidades individuales de cada menor, cuáles son sus objetivos, el porqué de su viaje migratorio, sus emociones y su historia de vida. Es un largo proceso durante el cual el equipo educativo se centra en escuchar y comprender el reto al que se enfrentan nuestros chicos, dejando atrás no sólo su país de origen sino también sus familias, su red social y sus costumbres culturales, tan importantes en estas edades. Y lo hacen por un reto que, en la mayoría de los casos, los une a todos: ayudar económicamente a sus familias una vez hayan conseguido su objetivo de inserción en nuestra sociedad.

Gran parte de nuestra labor educativa se centra en adquirir y desarrollar habilidades sociales, donde los menores aprenden a entender y respetar normas sociales, conocer la nueva cultura donde van a convivir, aprender habilidades de autonomía y desarrollarse personalmente.

Al fomentar la empatía, se aprende a respetar las diferentes perspectivas y opiniones. Además, se establecen relaciones basadas en la reciprocidad y la cooperación. Promover un ambiente positivo de aprendizaje, cuando una persona se siente entendida y valorada, provocará que dicha persona esté dispuesta a participar en las actividades educativas. Se mejora la autoestima, la confianza y la seguridad. Ellos se sienten comprendidos, tratados con respeto y valorados.

Desde el Centro ISL SAMU Dúrcal nos esforzamos por educar teniendo siempre presente la importancia de la empatía. En nuestras reuniones de equipo, intervenciones grupales e individuales, nuestros talleres formativos, salidas de ocio y tiempo libre, la empatía siempre está presente como vehículo de aprendizaje.

Los menores que han pasado por nuestro recurso son conocedores de la importancia de la empatía. Han podido aprender que es una habilidad importante que puede ayudarles a mejorar sus relaciones interpersonales fuera del recurso, que les será de enorme utilidad para reducir los posibles conflictos a los que se enfrenten en su día a día, y que será una herramienta necesaria para fomentar un mayor entendimiento y afianzar el respeto mutuo.

La empatía no trata solo de comprender a los demás, también consiste en tratarnos a nosotros mismos con dichos valores. Al ser empáticos con nosotros mismos, somos capaces de reconocer nuestras emociones y necesidades, y de encontrar maneras saludables de satisfacerlas.

En estos tiempos donde la polarización y la intolerancia son comunes en la mayoría de las áreas de la vida, la empatía se vuelve aún más importante. No olvidemos construir puentes y derribar todos los muros posibles.

Por SERGIO JIMÉNEZ DOMÍNGUEZ.
Educador ISL SAMU Dúrcal (Sevilla)