Principios de la logística médica
Los doctores Carlos Álvarez Leiva y Juana Macías Seda exploran los criterios que determinan la idoneidad operativa de los recursos en contextos críticos y de emergencia:
En las entregas anteriores de esta serie de artículos sobre gestión de crisis, hemos explorado los conceptos clave que conforman la esencia de la logística, entendida como la integración de arte, ciencia y técnica para gestionar de manera eficiente los recursos esenciales en cualquier operación. Ahora, en esta tercera entrega que publicamos en Revista SAMU, profundizamos en los principios fundamentales que rigen la logística y que determinan si un recurso es adecuado desde un punto de vista logístico y operativo.
La logística no consiste únicamente en mover cosas de un punto a otro, sino en hacerlo con precisión, optimización y coherencia. Para ello, existen criterios universales que permiten evaluar la idoneidad de un recurso dentro de un sistema logístico. Estos principios guían la toma de decisiones y garantizan que la gestión logística responda de manera eficaz a las demandas operativas.
A lo largo de este análisis, examinaremos los factores que influyen en una logística efectiva: desde la disponibilidad y la sostenibilidad, hasta la capacidad de respuesta y la resiliencia. Comprender estos principios es esencial para cualquier profesional que aspire a mejorar la planificación y ejecución de procesos logísticos en contextos críticos, ya sea en entornos de emergencia, gestión de crisis o actividades operacionales de alto impacto.
Estos son los principios logísticos:
1. Oportunidad
El principio de oportunidad es fundamental en logística: implica disponer de los recursos necesarios en el momento justo y en el lugar adecuado, ni antes ni después. En contextos de intervención en situaciones de crisis, cualquier retraso puede provocar un mayor deterioro, haciendo que la respuesta oportuna sea crucial para la eficacia y el éxito de las operaciones logísticas.
2. Economía
La logística exige una búsqueda constante de eficiencia económica, centrada en minimizar los costes en todas sus áreas, especialmente en el transporte. Esto implica no solo la reducción del gasto directo, sino también la optimización de recursos, la mejora de procesos y la incorporación de tecnologías innovadoras. Una gestión económica contempla el ahorro de tiempo, la disminución de residuos, la optimización de rutas y el uso eficiente del personal y los equipos.
3. Sencillez
El principio de sencillez alude a la necesidad de mantener procesos, sistemas y procedimientos tan simples y directos como sea posible. Este enfoque persigue eliminar la complejidad innecesaria para facilitar la comprensión, implementación y gestión de las operaciones logísticas. La sencillez contribuye a mejorar la eficiencia, reducir errores y acelerar la toma de decisiones y la ejecución de tareas. Además, un sistema logístico sencillo se comunica mejor y se adapta con mayor facilidad a cambios y emergencias, asegurando flexibilidad y resiliencia operativa.
4. Movilidad
El principio de movilidad hace referencia a la capacidad de los recursos, equipos y suministros para trasladarse con eficacia y eficiencia de un lugar a otro. Implica que los elementos logísticos deben diseñarse y empaquetarse de forma que se facilite su manipulación, carga, descarga y transporte, minimizando tiempos y esfuerzos. Esto abarca el uso de embalajes adecuados, la modularidad de los equipos y su compatibilidad con distintos medios de transporte.
5. Seguridad
La seguridad logística exige que los recursos sean altamente fiables y robustos, especialmente cuando se emplean en condiciones adversas, con climatologías extremas y mantenimiento limitado. Estos recursos deben soportar el uso por múltiples operadores sin comprometer su funcionalidad. La seguridad también incluye la protección de la información y la ciberseguridad, salvaguardando los datos críticos frente a amenazas externas.
6. Flexibilidad
La flexibilidad logística resalta la necesidad de que los recursos humanos y materiales se adapten a diversos usos y entornos, manteniendo su operatividad en cualquier circunstancia. Un recurso flexible puede reconfigurarse, redistribuirse o reutilizarse sin pérdida de eficacia, favoreciendo respuestas rápidas y efectivas ante situaciones imprevistas, y fortaleciendo la resiliencia del conjunto del sistema.
7. Sostenibilidad
La logística moderna debe integrar el principio de sostenibilidad. Es vital asegurar que los procesos sean respetuosos con el medio ambiente y también socialmente responsables. Esto incluye la reducción del impacto ambiental, el uso de energías renovables, la disminución de emisiones contaminantes y la optimización en el consumo de recursos. La sostenibilidad, además, se vincula a la responsabilidad social corporativa y con el cumplimiento de normativas ambientales nacionales e internacionales.
Esta entrega se centra en los principios que determinan si un recurso es logística y operativamente adecuado. Entre ellos se encuentran la disponibilidad, la accesibilidad, la sostenibilidad, la capacidad de respuesta, la compatibilidad y la adaptabilidad. Cada uno de ellos desempeña un papel esencial en la eficiencia de una operación logística, permitiendo optimizar recursos y minimizar riesgos durante su ejecución.
El conocimiento y aplicación de estos principios permite a los profesionales logísticos mejorar los procesos de toma de decisiones, de forma que se garantice que los recursos se empleen de manera eficaz y alineada con los objetivos estratégicos de cada misión u operación.